JUEGOS Y CANCIONES

JUEGOS Y JUGUETES DE ANTAÑO. (HOGAR SAGRADA FAMILIA)

Nuestras chicas y chicos del Hogar Sagrada Familia de la Vall d’Uixó, hoy han recordado sus juegos y juguetes de niños, aunque algunos contaban que no tuvieron demasiado tiempo para jugar, les arrebataron su infancia ya que a temprana edad tuvieron que trabajar o cuidar de sus hermanos. La mayoría pertenecían a familias numerosas, sólo Pilar y Manolita tenían un solo hermano.

JUEGOS DE NUESTROS MAYORES.

Todas recuerdan con placer sus juegos:

-canicas de barro o de cristal.

-la comba y las canciones que se cantaban al saltar: “El cocherito leré” o la canción en inglés que nos cantó Alexandra y las expresiones para saltar rápido (el tocinillo, pimientos calientes….).

- a pillar.

 - tres en ralla.

-“a amagar la tortugueta” (juego de niñas en Benassal).

-sambori, juego común en todos los pueblos. Incluso Alexandra nos contó que ella jugaba a uno similar (hop stotth).

JUGUETES.

Las muñecas eran uno de los juguetes que recibían las niñas. En principio era de cartón, que a veces se mojaba y se estropeaba. Después eran de plástico. Incluso P9ilar nos contó que ella tenía un tío que regentaba una fábrica de muñecas de porcelana, pero sus amigas, con las mazas de mortero hacían muñecas poniéndoles vestidos y pintándoles las caras. Estas eran las muñecas preferidas. En todos los casos las madres les hacían vestiditos para las muñecas. Alexandra y atuvo la Mitsie, muñeca similar a la Barbie. Fina recuerda su muñeca de cartón que su padre le llevó al pueblo donde estaban evacuados durante la Guerra Civil.

-En Alcublas, donde vivía Pilar, se les regalaba a las niñas cántaros y cubos para ir a la fuente a por agua.

-También recuerdan los cacharros de cocina, en principio de barro (l’escuradeta) y posteriormente de aluminio.

-El trompón y la trompa también eran juguetes propios de nuestros abuelos, el primero más propio de las chicas.

TRAVESURAS DE NUESTROS CHICOS Y CHICAS (HOGAR SAGRADA FAMILIA)

Pilar recuerda alguna travesura que hacían los niños de su pueblo: tiraban piedras a las puertas de una calle y salían corriendo. Como los vecinos ya lo sabían, les tiraban un cubo de agua, por lo que llegaban a casa todos mojados.

Fina nos recuerda cómo los niños jugaban a tocar los picaportes de las puertas y a esconderse para que no los pillaran.

Manolita recuerda que en Benassal tenían la costumbre los niños de hacerse una caseta en la montaña con piedras y ramas. También jugaban a pillar, a “amagar la corretgeta” y al tres en ralla.

Alexandra recuerda cómo tocaban los timbres de las casas y también llamaban por teléfono a las casas gastando bromas. En su niñez jugaba al Monopoly, y al Cluedo (juego de detectives), también a las cartas. En invierno, el lago que había cerca de su casa se helaba y con sus amigas patinaba en el hielo.

Aurora también recuerdan cómo tocaban a la puerta de un hombre soltero, Joaquín, que tenía muy mal genio y le decían: “Vosté planta garrofes?”. Si decía que sí, le contestaban: “Compre's un rocí”.

Victoria recuerda su infancia de forma muy triste, eran muchos hermanos y no había dinero para juguetes ni demasiado tiempo para juegos porque de muy pequeña cuidaba hermanos menores que ella. Aún así, recuerda jugar a las agujas, a la comba y a saltar.

Joaquín Marco, recuerda que los chicos jugaban al “canut” a ”les birles” i al “ferró cartó”. Siempre lo hacían en la calle, ya que no había la circulación de vehículos actual. Las chicas, en la mayoría de los casos eran “passetjadores”, es decir, se dedicaban a pasear bebés, y llevaban un delantal blanco. La broma más común, entre los chicos, era desatarles el delantal. Con añoranza nos recuerda un juguete que tuvo de pequeño: “un carret i una burreta”. También jugaban al fútbol con un balón hecho de trapos y lo hacían en la era del Roget.

Canciones

Cuando pasas por mi puerta, y no me dices ni adiós, lo que te llevas te dejas, no eres mejor que yo.
Asómate a la ventana, si te quieres asomar, ten cuidado no te rompas ese pecho de cristal; dentro de tu pecho tienes, dos escaleras de vidrio, una que sube el querer y otra que baja el cariño.
En la ralla de tu pelo, canta un colorín canario, y se baja por tu frente a beber agua en tus labios como si fuera  una fuente.


Cuando yo tenía dinero, me llamaban don Tomás y ahora como no lo tengo, me llaman Tomás no más.   Cuando yo era pequeñito, dormía con la criada y ahora que soy mayorcito no quiere la condenada.


Aunque me veas no llores, hablar con otra mujer, que los primeros son amores duros de aborrecer.  La rubia vale un duro y la morenita dos, yo me tiro a lo barato, rubia de mi corazón.

Hizo Dios por un ensayo rubia la mujer primera y como no le gustó, luego la volvió morena, morena la quiero yo.


La hierba buena se cría, en la corriente del agua, para qué me quieres hoy si me has de olvidar mañana.


Si quieres que yo te quiera desayúnate con romero, que se te quiten las manchas de bandolero.


Asómate a la ventana, cara de sardina frita, que cada vez que te veo se me revuelven las tripas.  Por esta calle que vamos hay charcos y no ha llovido, son lágrimas de una fea, que el novio no la ha querido.

Rosa Montesinos 18-2-2011










En esta página desde esta tarde encontrarás las canciones que cantaban nuestros/as mayores cuando eran pequeños/as.


ROSA MONTESINOS NOS RECUERDA UNA CANCIÓN DE SU INFANCIA

EL COCHECITO LERE

-El cocherito leré, 

me dijo anoche leré,

que si quería leré,

montar en coche, leré

y yo le dije, leré,

no quiero coche, leré,

que me mareo leré.

(esta canción se cantaba jugando a la comba)

EL PATIO DE MI CASA

-El patio de mi casa, es particular

cuando llueve se  moja, como los demás.

Aga-cha-té, y vuélvete a agachar,

Que los agachaditos no saben bailar.

H, I , J, K, L , LL, M, A,

Que si tú no me quieres, otro amante me querrá.

(esta canción era para jugar al corro cogido de las manos y el decir “aga-cha-té y vuélvete a agachar”, los niños se agachaban sin soltarse de la mano)

CAPERUCITA

-Caperucita ha salido sin que su madre lo sepa y en el bosque se ha metido, qué terror.

Un lobo terrible y fiero sale al paso de la niña, vestido de caballero, qué terror.

El lobo dice uuuuuuuuuuuuu y el gato dice miaaaaaaaaaa, mientras Caperucita rezaba estaba oración:

“Hada de los bosques, sálvame y con mi manita llévame”.

El hada de los bosques a la niña escuchó y con su manita la llevó.

Caperucita, no te vuelves a escapar sin permiso de mamá,

Que en el mundo hay fieras que parecen caballeros de verdad

MARIA JOSÉ Y JULIA LUENGO